Competencia intercultural y fallo pragmático: el caso de los cumplidos y los desacuerdos en inglés como lengua extranjera
DOI:
https://doi.org/10.32870/vel.vi15.145Palabras clave:
Fallo pragmático, Disonancia comunicativa, TEFL, Actos de habla, Competencia interculturalResumen
Dominar un idioma extranjero implica más que tener una buena competencia lingüística. De hecho, una de las competencias más difíciles de adquirir es la pragmática (Hymes, 1972) o la habilidad de realizar actos de habla acordes con el contexto y las expectativas de nuestros interlocutores (Yates, 2010; Piller, 2017). En la lengua materna, estos conocimientos pragmáticos se adquieren durante el proceso de aculturación del individuo (cf. Schumann, 1986). Sin embargo, pueden dar lugar a numerosos malentendidos cuando se trata de una lengua extranjera, especialmente en el caso de contextos interculturales donde las expectativas pragmáticas de los interlocutores pueden ser muy diferentes. En consecuencia, se pueden producir más fallos pragmáticos. En este artículo, nos centraremos en las nociones de fallo pragmático (Thomas, 1983) y disonancia (Zamborlin, 2007) y en como ambas pueden jugar un papel crucial en la comunicación intercultural. De forma más concreta, nos centraremos en dos actos de habla: los cumplidos y los desacuerdos. Los motivos que nos han llevado a elegir estos actos de habla son que ambos pueden verse como extremos respecto a la imagen positiva de nuestro interlocutor. Así, los cumplidos pueden emplearse para reforzar la imagen positiva del interlocutor mientras que los desacuerdos suponen una clara amenaza para la misma. Puesto que ambos son extremos, estos actos de habla pueden dar lugar a fallos pragmáticos en encuentros interculturales. Como profesores de lengua extranjera, uno de nuestros roles principales es desarrollar tanto la competencia pragmática de nuestros alumnos en la L2 como despertar su consciencia meta-pragmática.